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104. Las dos bodas de Brianda de Luna

¡Febrero es mes temático en el podcast!

Y por San Valentín vamos a hablar de amor en los próximos episodios.

Y es que, a 20 kilómetros de Zaragoza, en el castillo de Alfajarín tuvo lugar una historia que acabó poniendo patas arriba parte del reinado de Pedro IV el Ceremonioso. ¡En este episodio hablamos de las dos bodas de Brianda de Luna!

La fotografía de la carátula es parte del cuadro “Romeo y Julieta” del pintor británico Frank Dicksee y que se conserva en la galería de arte de Southampton.

 

María Argota Recaj

María Argota Recaj

Autor

Contenido del Podcast

Introducción

La historia de Brianda de Luna es una de las más fascinantes de la Edad Media aragonesa. Lo que comenzó como un matrimonio entre dos linajes poderosos terminó en un escándalo que dividió al reino y desató una guerra feudal. En este episodio, exploraremos cómo una historia de amor llevó a Aragón al borde del caos, con la intervención del mismísimo Pedro IV el Ceremonioso.

Un matrimonio envuelto en polémica

Brianda de Luna y Lope Ximénez de Urrea

Brianda de Luna pertenecía a una de las familias más influyentes del Reino de Aragón. Su padre era Lope de Luna, primer conde de Luna y señor de Segorbe, y su madre, Brianda de Agoult, descendiente de un poderoso linaje francés, ligado al papa Clemente V. Además, su hermana María de Luna fue esposa del infante Martín, futuro Martín I el Humano, lo que la emparentaba directamente con la Corona.

En 1374, Brianda contrajo matrimonio con Lope Ximénez de Urrea, heredero de otra familia aristocrática de gran renombre. Sin embargo, tras cuatro años de convivencia, Brianda tomó una decisión inesperada: abandonó a su esposo, alegando que nunca habían consumado el matrimonio.

Este argumento suponía una gran humillación para Lope Ximénez de Urrea, ya que Brianda lo acusaba implícitamente de impotencia, uno de los pocos motivos aceptados por la Iglesia para anular un matrimonio en aquella época.

El triángulo amoroso que desató el conflicto

Luis Cornel, el tercer protagonista

En medio del escándalo, Brianda de Luna encontró refugio en los brazos de Luis Cornel, señor de Alfajarín y miembro de una de las familias más antiguas de Aragón. Sin haber obtenido la nulidad de su primer matrimonio, Brianda y Luis contrajeron matrimonio por "palabras de presente", es decir, sin intervención eclesiástica, y tuvieron un hijo.

Esta situación era inadmisible para la sociedad de la época. Mientras los abades de Montearagón y Veruela dictaban que Brianda debía regresar con su legítimo esposo, ella y Luis Cornel ignoraron la sentencia, lo que provocó la ira de Lope Ximénez de Urrea.

Una guerra feudal sacude Aragón

El enfrentamiento entre los linajes

La negativa de Brianda y Luis Cornel a acatar la sentencia eclesiástica llevó a Lope Ximénez de Urrea a tomar las armas. Lo que comenzó como un conflicto personal entre dos nobles pronto se convirtió en una auténtica guerra feudal, en la que ambos bandos recibieron la ayuda de sus partidarios en Aragón, Cataluña y Valencia.

Lope Ximénez de Urrea incendió los campos y arrasó los bosques de Luis Cornel, sitiándolo en su castillo de Alfajarín. La violencia llegó a tal punto que la estabilidad del reino se vio amenazada, lo que obligó a Pedro IV el Ceremonioso a intervenir.

La intervención del rey Pedro IV el Ceremonioso

Intento de tregua y ultimátum real

Pedro IV intentó mediar en el conflicto proponiendo una tregua, pero mientras Lope Ximénez de Urrea accedió, Luis Cornel se negó. Ante esta negativa, el monarca le envió una carta dándole un plazo de 20 días para comparecer ante él o ante el gobernador de Aragón.

Además, Pedro IV ordenó al gobernador que, si Luis Cornel no obedecía, tomara sus tierras en nombre de la Corona. Luis Cornel ignoró la advertencia y las tropas reales ocuparon sus dominios. Solo entonces, comprendiendo la gravedad de la situación, Luis Cornel cambió de opinión.

El acuerdo final y la solución del conflicto

La sentencia de divorcio y el nuevo matrimonio

Luis Cornel se reunió con Pedro IV en Valencia y, junto a la reina, llegaron a un acuerdo:

  • Brianda de Luna quedaría bajo custodia de dos caballeros (uno elegido por Pedro IV, el otro por Luis Cornel) hasta que se resolviera la nulidad matrimonial.
  • Si se concedía el divorcio, ella y Luis Cornel podrían casarse legalmente.
  • Luis Cornel accedía cesar las hostilidades con Lope Ximénez de Urrea.
  • Pedro IV se comprometía a reparar los daños que la guerra feudal causó a Luis Cornel.

Ocho años después, en 1387, el divorcio fue finalmente concedido y Brianda y Luis pudieron casarse oficialmente. Sin embargo, debido a su parentesco en cuarto grado, tuvieron que solicitar una dispensa papal.

Además, Brianda y Luis juraron no coincidir con Lope Ximénez de Urrea en ningún lugar durante quince años, salvo en presencia de los reyes Juan I y Violante de Bar, o del infante Martín y su esposa María de Luna.

Conclusión

La historia de Brianda de Luna no solo es un relato de amor y rebeldía, sino también una muestra del complejo juego de alianzas y rivalidades entre los grandes linajes de Aragón en la Edad Media. Su caso es un ejemplo de cómo las pasiones personales podían desembocar en conflictos bélicos que ponían en jaque la estabilidad del reino.

Para quienes deseen profundizar más en esta historia, recomendamos la lectura de los artículos académicos de Esteban Sarasa Sánchez, Mitos y ritos feudales en Aragón. El caso de Doña Brianda de Luna; y el de Ana del Campo Gutiérrez titulado, El matrimonio como detonante de conflictos feudales en el Aragón del siglo XIV: el divorcio de Luis Cornel y Sevilla de Luna, y la intervención de Elfa de Jérica. También merece destacar que esta historia ha sido llevada al terreno de la novela histórica con Creciente de luna de Eloy Morera y Cristina Abad.

¿Quién dijo que la historia medieval era aburrida?